En el 1992, el mundo de la fotografía fue tomado por un pequeño grupo de apasionados amigos se convirtieron en un enorme, movimiento analógico accidental y que fue creciendo hasta tener más de 1 millón de miembros en la comunidad, yendo en la dirección opuesta respecto a las mareas de la revolución digital. Desde entonces, junto a esta comunidad, Lomography se ha convertido en una organización activa a nivel global: dedicada a nadar a contracorriente, y difundiendo un tipo de fotografía más creativa e experimental alrededor del mundo. Lomography ha construido LomoWalls, montado exposiciones, organizado Congresos Mundiales Lomográficos ? ha abierto tiendas, Embajadas Lomográficas, corazones, ojos, y mentes.

Los LomoWalls siempre han sido un símbolo icónico, caleidoscópico y delatador de que Lomography ha viajado. Un LomoWall es un mosaico hecho a mano a partir de cientos y miles de fotografías coloridas, sacadas por Lomógrafos de los cuatro rincones del mundo. En parte exposición, en parte experiencia, el LomoWall nació del deseo de encontrar una manera más ruidosa, salvaje, democrática e interactiva de exponer fotografías. Uno de los ejemplos más emotivos fue en 1994: en un contexto sensible de pos-Guerra Fría, Lomography lanzó su primera exposición internacional de la historia, llamada ?Moscú-Nueva York?; asociando dos galerías en Rusia y Estados Unidos a través de LomoWalls creados en ambas. Quizás ahora más que nunca, con otros muros ...