Llega el fresquito y con él, el temido cambio de armario. A nuestro closet vuelven las mangas largas, los gorros, los abrigos, botas y bufandas y todas esas prendas voluminosas de las que ya casi te habías olvidado. No es de extrañar que acostumbre a ser el cambio más tedioso del año, y es que el paso de la ropa más ligera a la más voluminosa y pesada, parece convertir nuestro espacio de almacenaje en mucho más pequeño de lo que era. Así que a fin de guiarte en la tarea de hacer el cambio de armario, quiero proponerte unos cuantos consejos para que ponerte manos a la obra resulte de lo más productivo, práctico y funcional. ¡Quédate que comenzamos!
Fuente: Clara
Personaliza la altura entre tus baldas
Cada hogar, persona, ambiente y forma de vestir es completamente distinta y personal. Así que para aprovechar al máximo el espacio en tu armario, lo ideal será que la altura entre baldas y distancias entre accesorios y huecos libres previstos, se adapte cien por cien a ti. Hacerlo te garantizará el máximo aprovechamiento del espacio y mantener el orden de esta forma, te resultará mucho más sencillo y cómodo. Fuente: Princesita
Enrolla tus complementos textiles
Ordenar el armario sin morir en el intento puede ser cuestión de pequeños gestos que a simple golpe de vista te permitan visualizar todo y encontrar lo que buscas sin necesidad de meter las manos en el armario. Calcetas, medias, pañuelos, bufandas, mallas y todo aquello que te permita enrollarlo ...